Segunda película en la que Frederick Stafford encarnó al agente OSS 117, el James Bond francés nacido de la mente del novelista Jean Bruce.
Una organización que opera desde Tokio quiere vender a los Estados Unidos un arma secreta por cien millones de dólares. Si no aceptan comprarla, amenazan con destruir las bases americanas. Un agente especial, conocido por la clave OSS-117, es enviado para abortar los planes criminales.