Faye Dunaway y Frank Langella a la órdenes de René Clément en una película que mezcla suspense y drama con la historia de un matrimonio en crisis. Jill (Faye Dunaway) es una joven norteamericana que vive en París con su marido Philippe (Frank Langella), un gran genio de la informática. Philippe decide dejar su trabajo pero las excusas que alega no convencen a Jill. Todo cambia radicalmente cuando sus hijos son secuestrados y Jill descubre que su marido trabaja para una empresa que no esta dispuesta a perder a uno de sus trabajadores.