Mel Gibson vuelve por todo lo alto a la dirección con este relato épico que pasará a la historia como una de las más brutales y espectaculares películas bélicas jamás filmadas. Esta es la historia de Desmond Doss (Andrew Garfield), un joven médico militar que participó en la sangrienta batalla de Okinawa, en el Pacífico, durante la II Guerra Mundial, y se convirtió en el primer objetor de conciencia en la historia estadounidense en recibir la Medalla de Honor del Congreso. Doss quería servir a su país, pero desde pequeño se había hecho una promesa a sí mismo: no coger jamás ningún arma.