La primera película donde Christopher Lee encarnaría al legendario personaje Fu Manchú. La saga, compuesta de cuatro películas más, fue producida por Harry Allan Towers, conocido por sus numerosas colaboraciones con Jess Franco. Unas muertes por estrangulamiento alertan a Sir Nayland Smith, del Scotland Yard sobre la posibilidad que Fu Manchú no esté en realidad muerto. A pesar de haber asistido a su ejecución, un spray asesino hecho a base de bayas tibetanas parecen estar relacionadas con los crímenes y las pistas conducen hacia el río Támesis. Londres está en peligro y el regreso de Fu Manchú ya es un hecho.