Esta película está considerada como uno de los mejores western de la Historia del Cine. John Ford, cuyo nombre es sinónimo de western, dirige el reparto perfecto: James Stewart es el torpe y encantador hombre de leyes decidido a limpiar el hermoso lugar de Shinbone de molestias y de malvados; el malo se llama Liberty Valance y nos encontramos con la estrella por excelencia del género, John Wayne, en una gran interpretación. Stewart y el duro Wayne se encuentran, además, enamorados de la misma mujer. Uno conseguirá a la chica y el otro al pistolero.