Máximo galardón en Karlovy Vary. Lo que apunta hacia una historia sensiblera –II Guerra Mundial, gemelos mimados de 13 años abandonados por su madre en casa de una abuela alcohólica y cruel– se convierte en perturbador y descarnado relato tras la decisión de los niños, ante el entorno hostil, de entrenar con rigor cuerpo y espíritu para dejar de sentir hambre, frío, dolor y emociones. Una metamorfosis sistemática y drástica, adaptación de El gran cuaderno de Agota Kristóf. Con fotografía de Christian Berger (La cinta blanca).