Basada en una novela de Walter Edmonds, el primer film en color de John Ford fue un homenaje al valle de Mohawk, un territorio crucial durante la Guerra de Independencia Americana.Colbert y Fonda forman parte de un grupo de campesinos rebeldes establecidos en una zona fronteriza del norte del estado de Nueva York, en la que luchan contra las tropas británicas y contra los indios. El maestro Ford exalta el espíritu patriota y los valores pioneros de los colonos al tiempo que retrata otro capítulo de la historia americana.