Considerada internacionalmente por la crítica como una obra única, la ópera prima del cineasta Hu Bo destaca por una puesta en escena magistral con planos secuencia hipnóticos y una belleza vertiginosa y elegíaca que impregna cada uno de los 234 minutos de la cinta. Hu Bo se suicidó apenas acabada la postproducción del film con solo 29 años. Un talento inmenso que deja como legado una de las obras maestras imprescindibles del cine chino contemporáneo. Tal como apuntó Béla Tarr, mentor y amigo de Bo, “esta película nos acompañará a todos para siempre”. (Festival D'A)
Al norte de China, una enorme ciudad posindustrial está sumida en una niebla perpetua que atrapa a sus habitantes. Una mañana, un simple altercado entre dos adolescentes de un instituto va a forjar el destino de cuatro individuos, victimas del egoísmo familiar y de la violencia social. Lo único que comparten es la misma obsesión recurrente: huir hacia la ciudad de Manzhouli, donde según dicen, un elefante de circo permanece sentado durante horas, inmóvil, impasible, ajeno a los problemas del mundo.