Obra cumbre del expresionismo con la que el alemán Murnau -recién llegado a Estados Unidos- realizó toda una invasión de talento y dominio técnico en Hollywood. Una calidad artística pionera e insuperable (un genial crítico de cine americano dijo que "Sunrise" despliega más fantasía en sus movimientos de cámara que una semana de MTV) se pone al servicio de la historia de un triángulo amoroso en el que la infidelidad y la redención se disputan el corazón de un hombre que debe elegir entre dos mujeres. Una historia universal. Sublime como melodrama romántico, lo mismo nos sumerge en la intriga de un crimen pasional que muestra retazos de la comicidad propia de la época. Un granjero (George O Brien) convive felizmente en el campo con su esposa (Janet Gaynor). Pero la aparición de una seductora mujer (Margaret Livingston) de la ciudad hace que comience a enamorarse de ésta, y a pensar que su mujer es un estorbo que se interpone en la felicidad entre él y su nueva y sofisticada amante.