Tony es un exitoso hombre de negocios cubano-americano de Wall Street. Su madre es cubana, su padre americano. En unas vacaciones en Miami, ve los restos de una balsa a la deriva. En ella llegó una bailarina acuática cubana de nombre Mariana, en busca de una mejor vida en América. Intrigado, Tony decide ir a La Habana, Cuba con el fin de encontrar las familias de las víctimas, comunicarles lo acaecido y saber algo más de Mariana. Encuentra en La Habana a la familia Durán y con gran sorpresa descubre que Mariana está viva. Durante su búsqueda, su travesía se va transformando en un profundo descubrimiento personal al estar expuesto a una cultura ajena y fascinante que le ayuda a configurar su propia identidad.