Júlia de Paz debuta con la adaptación de su corto homónimo; un crudo retrato sobre una madre desbordada, interpretada por una brillante Tamara Casellas, cuyo talento fue premiado con la Biznaga de Plata en el Festival de Málaga.
Cuenta la historia de muchas mujeres expuestas en soledad a la mitificada maternidad. Tras varias advertencias, Ade echa a su amiga Pepa de su casa y esta termina viéndose en la calle junto a Leila, su hija de seis años. Sin nadie que las ayude, Pepa y Leila lucharán solas para encontrar un lugar donde vivir. Enfrentándose a cada obstáculo, emprenderán una búsqueda que conllevará también un acercamiento dentro de su relación antes prácticamente inexistente y distante. Se creará un nuevo vínculo entre madre e hija, dónde tendrán cabida las equivocaciones y la desidealización.