Sidney Poitier encarna a un profesor de instituto que debe tomar las riendas de una clase repleta de rebeldes alumnos en este popular film británico que terminó de dibujar el perfil polifacético del actor afroamericano. Supuso uno de los mayores éxitos de taquilla de Poitier a la par que uno de sus papeles más logrados. Papel que repetiría en 1996 de la mano de Peter Bogdanovich.
Mark Thackeray, un ingeniero negro sin trabajo, acepta un empleo como profesor de un grupo de estudiantes bastante conflictivos en una escuela de la periferia de Londres. Sus alumnos son insolentes y groseros pero, en el fondo, no tienen malos sentimientos. Al principio intenta ganarse su confianza utilizando los métodos tradicionales, pero fracasa tan estrepitosamente que no tendrá más remedio que recurrir a otras fórmulas.