Concienciada de llegar a la cifra de diez asesinatos en un corto periodo de tiempo, la cazadora Caroline Meredith está a punto de cumplir el objetivo propuesto. Aunque podría presumirse que Caroline actúa fuera de la legalidad, su condición de cazadora licenciada la posibilita realizar una serie de asesinatos selectivos que tienen en el súbdito italiano Marcello Polletti su presumible décina víctima.